lunes, 14 de mayo de 2012

La tensa espera


No conozco la estadística, seguro que “algunos expertos calculan que cada minuto, en todo el mundo, comienza una nueva tensa espera”… No conozco los datos porque yo no soy experta, y no tengo predicciones que vayan más allá de lo que voy a cenar esta noche. Pero… sí, soy testigo de las tensas esperas que comienzan a mi alrededor. Esas esperas llenas de preparativos que son vividas con emoción, ternura, paciencia e inquietud y mucho, mucho amor. Esas esperas tensas, en menor o mayor medida, porque todo vaya bien, por cuidar del mayor de los tesoros y lograr ser el mejor de los guardianes. Unas esperas nada fáciles que gracias al amor infinito hacen que la tensa espera sea más espera y menos tensa.

Las tensas esperas acaban y comienzan. Una gran tensa espera está cada vez más cerca de terminar, otras apenas acaban de comenzar…

lunes, 12 de marzo de 2012

Nunca antes sonó tan bello Sabina



Hace algunas semanas disfruté de uno de mis regalos de cumple, esos que te entregan el mismo día y puedes gozar de ellos cuando ya te has olvidado de los años que ya no cumples. Tuve la suerte de que Sergio me/nos regalara un par de entraditas para el musical de Sabina, y es que un musical al año no hace mucho daño al bolsillo.



Bien es cierto que yo no soy muy “Sabinera”, aunque por cercanía a fieles seguidores del de Úbeda pasé mi adolescencia escuchando canciones del pirata cojo con pata de palo, me pregunté quién habría sido tan desgraciado de robarle al pobre hombre el mes de abril, le compadecí por vivir en plena Calle Melancolía, y como dijera la madre de una buena amiga, no dudé en reconocerle como “puto” al escuchar que sin embargo sería capaz de engañar y cambiar por cualquiera…

“Más de 100 mentiras” es un punto de inflexión en mi opinión sobre Sabina, puesto que tras ver el musical le he redescubierto a través de las voces de Juan Pablo di Pace, Guadalupe Lancho y Juan Carlos Martín… que interpretan con tal sentimiento cada uno de los temas que consiguen emocionar y preguntarte si realmente los has escuchado porque no parece el mismo.

Juan Pablo Di Pace, interpreta a un apuesto galán-canalla. El actor italoargentino es genial como bailarín y tan buen cantante como mal actor, recordar sus más que insuficientes interpretaciones en las series “90-60-90” y “Física o Química”, sólo salvables por su imponente físico. Destaca en el montaje por ser protagonista y cantar muchas y de las mejores canciones de Sabina y moverse sobre el escenario como pez en el agua.

Guadalupe Lancho, regresa al musical después de aparecer en series muy conocidas de nuestro país para descubrirnos que Sabina también puede cantar con voz de mujer.

La interpretación de Víctor Massán me dejó perpleja… es el muerto más vivo que he visto nunca. Casi tres horas de histrionismo puro, canto, baile y descaro… quizá un registro muy similar a su MC de “Cabaret”…

Juan Carlos Martín, ese Benavides de Vídeos de Primera que con sus caras de idiota nos hacía reír, qué talento tan oculto y qué suerte descubrirlo ahora, y saber que son 14 los musicales que carga a su espalda. Qué grata sorpresa escuchar como canta y baila claqué.

Y qué suerte poder disfrutar de los “cover” del elenco principal. Nunca vemos el reparto principal completo, es nuestro sino, porque siempre falta alguno… en este caso pudimos disfrutar de la actuación de Toni Viñals, genial como “Manitas” y de Jaime Zataraín como Tuli. Gran suerte y digo gran, haberle visto a él y no a Álex Barahona ("Los Serrano", "Física o Química"), porque tras la escucha del CD pude constatar que mata y remata los temas que interpreta… en fin, como decías en una entrevista promocional “el musical era mi asignatura pendiente”… y lo sigue siendo guapo, que de esto tienes mucho, pero de cualidades canoras no tanto.

Así, que después de ver el musical no dejo de escuchar una y otra vez las canciones, sin duda lo mejor de un montaje apuntalado sobre un guión facilón, previsible y como dije antes, nada real.

¡Qué viva el musical!

lunes, 27 de febrero de 2012

Juntando letras. El origen


Como precuela de cualquier saga cinematográfica que se precie hoy nace oficialmente Juntando letras, mi sitio en la red, el espacio donde escribiré siempre que pueda, en el que me desahogaré contando mis penas y compartiré mis alegrías.

Creo que todo tiene cabida en este blog: mis aficiones, mis fobias, alguna que otra reflexión, nunca demasiado profunda, y lo que vaya surgiendo.

Lo que nunca será Juntando letras es un blog para eruditos, abstenerse puristas, y bienvenidos frikis, síííí, bienvenidos todos, porque toda persona guarda en su interior un pequeño friki al que alimentar… yo le surto habitualmente, sí y tengo la certeza de no ser la única.

Este sitio nace sin la pretensión de retar a los hombres de ciencia y de fe. Las fotografías jamás osarán rivalizar con las de los palabrógrafos, y mis comentarios, aunque se acerquen, jamás serán tan mordaces como los de Van y Ty, siempre tan acertados, tranquilo “bro”, no vengo a hacerte la competencia “you are the one”.

Sed todos o alguno bienvenidos.